Antiguamente sobre enamorarte piensa En Caso De Que esta humano te conviene o no. En caso de que te enamoras, nunca seras competente de dictaminar objetivamente.

Un aprieto personal, responsable, prudente y libre precisa planificacion

Flirtear es jugar al amor. Un ceder al atractivo sensible asi­ como sentimental, cultivar un trato superficial, carente hondura, falto intencion muchas de casarse. y la vida nunca puede queor por entretenimiento.

El flirteo seri­a Algunos de los nombres que se le da a la falsa maniobra sobre jugar al amor desprovisto comprometerse y sin asentir las consecuencias. Es el comportamiento sobre una pareja que se dedicacion a maniobras sexuales de de mas grande o menor capacidad, con el agravante de que excluyen toda intencion de comprometerse definitivamente.

Las compromisos definitivos son propios sobre la madurez. Los que cambian continuamente de capricho son las ninos.Dice el celebre moralista Haring: «El andar jugueteando con el sexo en este estadio del desarrollo obstaculiza el progreso hacia la madurez» 43.

Por su misma naturaleza, el flirteo es una mentira. Aor. Nadie dice: «Te voy a querer una semana, sin embargo la semana que viene querre an una diferente persona». Esto se llama cor verdadero dice que es para continuamente: «te querre siempre», «te querre inclusive la muerte».

El flirteo es la traicion misma de el amor, asi­ como una de sus caricaturas mas tristes. asi­ como son profundos las males que acarrea a las protagonistas. Ademas del mal moral que lleva consigo, el flirteo puede dejar la profunda huella psicologica sobre frustracion, desengano, amargura. Nunca produce experimentados sino, mas bien, decrepitos. Es una mutilacion de el apego, asi­ como con el amor no se juega carente estar profundamente or seri­a lo mas familiar y lo mas delicado de el ser persona. El flirteo les destroza mucho mas a ellas que a ellos. Porque de ellas el apego es algo mas profundo, mas total, y mas concluyente. Cuando 2 se quieren, no flirtean, se respetan y se cuidan mutuamente para quedar enteros Con El Fin De la compania sobre toda su vida. Cuando dos flirtean, creen que van a pasarlo bien, No obstante, en realidad, se enganan mutuamente y se danan en las fibras mas delicadas de el espiritu 44.

Nunca ensena, sino agosta

Primero sobre enamorarte piensa En Caso De Que esta sujeto te conviene o no. En caso de que te enamoras, nunca seras capaz de juzgar objetivamente. No empieces a proceder con la ser que nunca te conviene. En caso de que empiezas a proceder, acabaras enamorandote; asi­ como En Caso De Que te enamoras, te casaras pero esa casamiento sea un disparate.

El flirteo puede llevar al matrimonio, pero esto es infrecuente. A lo que lleva seri­a a desvalorizar el sentimiento asi­ como an estragar notablemente la intensidad de amar. De ahi el desengano sobre bastantes que, al escaso lapso de casados, se sienten defraudados, frios, insensibles con su mozo pareja.asi­ como podri­a ser abusaron de esa potencia sobre amar durante su mocedad; y Actualmente el matrimonio no les dice nada.Ademas, quien se acostumbra al flirteo, luego se cansa de sujetarse a la sola alma ?Que va an acontecer de ese casamiento?

Asi que el relaciones nunca resulta una pasatiempo, ni un placer, sino una escuela preparatoria para el casamiento, que resulta una de estas misiones mas desmesurados y mas serias que Dios ha confiado al hombre y a la chica.

Por eso el flirteo seri­a un juego peligroso que muchas veces termina con que es una novia de pedidos por correo resbalones deshonestos, y invariablemente estropea el corazon dejandolo lastimoso, desilusionado y decepcionado, quizas Con El Fin De invariablemente; o ligero, superficial y frivolo, incapacitado para amar en asentado a nadie.

Dios ha puesto en el corazon humano el apego con el fin de que sea en el casamiento el aliento de las penas, trabajos asi­ como sufrimientos. No obstante la lozania se ha lanzado a jugar al apego, ha hecho del apego un placer, asi­ como igual que fruto poseemos esos matrimonios sobre corazones cansados, incapaces de aor de endulzar las sacrificios de el hogar.